La sesión tuvo por objeto analizar en su conjunto el proyecto originado en moción, que pretende llenar un vacío legal en cuanto a la protección, producción y comercialización de la actividad apícola en Chile.
Al respecto, el Subdirector del SAG, Oscar Camacho, manifestó que el proyecto reúne algunos puntos muy dispersos que son necesarios precisar y analizar en profundidad. Asimismo, aseguró que la actividad apícola es algo que posee “mucho movimiento y por lo tanto requiere control”, indicó.Por su parte, el diputado
Felipe Letelier (PPD), señaló que a nivel país nos encontramos en retroceso en lo que respecta a la actividad apícola, por lo que solicitó que dentro del proyecto se puntualice el ente fiscalizador, y para ello pidió al Ejecutivo realizar una indicación que determine a la entidad respectiva.
En tanto, Daniel Barrera, representante de ODEPA, señaló que es clave incluir en el proyecto más información sobre los apicultores, mientras que Marisol Pavez, abogada de la misma entidad, indicó que es necesario precisar en un solo cuerpo legal lo que hace referencia a la regulación de la actividad apícola, a modo de ordenar lo que respecta a las normas. Así también, planteó mantener un estándar a nivel nacional, en lo que se refiere a la producción de miel, para que el consumidor chileno no se vea perjudicado.
Para el diputado Ramón Barros (UDI), es necesario resolver bien lo que estipula el artículo 7 en el proyecto, con el fin de que se logre definir en su conjunto lo que respecta a aplicación de plaguicida en colmenas, ya que no se detallan en profundidad los mecanismos que se usarán y cuál será la entidad que regulará la aplicación.
En esta línea, el Presidente de la Comisión y autor del proyecto de ley, diputado José Pérez (PRSD), indicó que “las abejas son el agente polinizador más importante que existe en la tierra, por lo que sin polinización no hay alimentación para el ser humano”.
En este contexto, argumentó que “tenemos en Chile lugares donde han desaparecido altos porcentajes de abejas. Algunos por aplicación de productos químicos de forma irracional, sin control, sin autorización del SAG”. Por esto, señaló que, “hay una ley antigua que no se respeta, en la que se señala que deben avisar aquellas personas que aplican insecticida a través de las radios cercanas, cuándo lo van a hacer y a qué hora, para que los agricultores tomen las medidas y las precauciones del caso, con el propósito de evitar la mortandad de abejas. Hay enfermedades que no hemos sabido controlar”.
Por ese motivo, indicó que en 2014, a petición de él y junto con el Ministerio de Agricultura, se envió a Argentina a cinco apicultores, para que conocieran cómo se maneja en dicho país la apicultura, y a partir de su experiencia pudieran replicar lo aprendido en nuestro país.
En lo que respecta al compromiso del Ministerio con este proyecto, dice coincidir con plenamente con el Ejecutivo. “Tenemos mucha coincidencia con el Ministro de Agricultura, y la verdad de las cosas, yo creo que vamos a avanzar rápidamente para sacar este proyecto de ley este año”.
Así también, argumentó que tienen una tarea muy importante con los apicultores, que a su juicio hacen un trabajo enorme. “Los apicultores nunca han tenido la ayuda que corresponde del Estado, y estamos hablando de gente muy pequeña que tiene una hectárea o media hectárea. En ese sentido, debemos trabajar en conjunto con el Ejecutivo, por que si nosotros nos apoyamos y después impulsamos algún plan de fomento apícola, vamos a estar dando justo en el clavo, porque esta actividad hay que desarrollarla”.
Finalmente, manifestó que “con esta ley vamos a incentivar que se siga trabajando con las abejas para que podamos tener una gran producción y aumentar la producción apícola a nivel nacional, porque de ellas depende la vida humana”.
Por su parte, el diputado Iván Flores (DC), dijo que nuestro país ha sido bastante ingrato con quienes son productores apícolas, por lo que pidió que se aproveche esta instancia para fijar un marco normativo, y que sea el Ministerio quien tome el tema de la apicultura con seriedad. En este mismo contexto, señaló que “debemos buscar alguna forma de regular los territorios, ya que las pobres abejas andan por todos lados, esto con el fin de evitar la contaminación de estas por otros químicos”.
Así también, dijo que “es un proyecto que tiene una tremenda trascendencia, yo diría insospechada, así como también son insospechadas las consecuencias de no hacer nada en esta línea, lo que significa poner en riesgo la capacidad productiva del país, para incluso el propio consumo interno”.
Argumentó que es una preocupación mundial, ya que EE.UU. fue uno de los primeros en dar la señal de alerta. “Yo diría que ya lleva alrededor de 30 años con alarma, respecto de la disminución brutal en la población de abejas en el mundo”.
“Recordemos que las abejas son una pieza muy fundamental en la cadena productiva de alimentos en el planeta, polinizan, y están desapareciendo por el uso indiscriminado de plaguicidas, y porque no existen políticas específicas para fomentar su cultivo y su producción. Asimismo, admite que “están desapareciendo también por otros efectos como se supone que son por ejemplo las irradiaciones de microondas, el uso cada vez más masivo de aparatos que trabajan con microondas, que al parecer generan una especie de aturdimiento y desorientación de las abejas para poder hacer sus recorridos”.
Finalmente, culminó diciendo que “tenemos un problema del corto y mediando plazo en el mundo, y Chile no se ha estado preocupando de ello. Yo he sido muy crítico en cuanto a nuestra incapacidad de tomar este tema”
“Estamos entrando en materia de un proyecto que es de apenas un par de hojas, no obstante cada artículo en su contenido, significa un gran desafío que hoy día en conjunto con el Ministerio de Agricultura tenemos que desarrollar”, remató.
Por su parte, la diputada Alejandra Sepúlveda (IND), pidió a los invitados que puedan chequear los artículos del proyecto, para que puedan hacer indicaciones correspondientes, sobre todo en lo que respecta al artículo segundo que describe los términos utilizados para la actividad apícola.
Así también, solicitó que se señale lo que dice relación a la trazabilidad apícola, determinando cómo se hará para definir el ordenamiento territorial productivo.