El Contralor de la República, Jorge Bermúdez, explicó en la Comisión Investigadora por las fallidas licitaciones para la construcción de hospitales programados para marzo de 2018, por qué se rechazó la toma de razón en los recintos de Las Higueras de Talcahuano, Linares y Barros Luco Trudeau de la Región Metropolitana.
El timonel del ente fiscalizador señaló que se realizaron exámenes de legalidad considerando los principios de igualdad de los oferentes y considerando la estricta sujeción a las bases de licitación, cuyo cuerpo normativo son resoluciones de la subsecretaria de redes asistenciales.
Jorge Bermúdez dijo que en las adjudicaciones a dichas empresas no se presentaron todos los documentos consignados en las bases de licitación, por ejemplo, “cuando las bases dicen que se necesitan profesionales con 10 años de experiencia en un lapso de 15 años, o cuando dice que los antecedentes deben dar cuenta de la capacidad financiera de determinado oferente, deben estar efectivamente esos documentos. No nos podemos pronunciar si eso es correcto o no, o si el equipo está bien formado o no. Si el servicio de salud estima que necesita a ese tipo de ingeniero, nosotros podemos verificar que venga así en las ofertas, eso teníamos que representarlo”.
El contralor agregó que para determinar que haya responsabilidades administrativas “debe hacerse una investigación. Estamos hablando de obras del sector salud, pero que están a cargo no del Ministerio, sino de servicios de salud que son descentralizados. Por lo tanto, la responsabilidad que puede haber allí es en el servicio de salud”.
Entre otros datos informó que, en los últimos 5 años, es el ámbito de la salud donde más observaciones hay en materia de adjudicación de obras públicas.
Respecto a las observaciones de Contraloría, sólo se apeló y entregaron nuevos antecedentes para los nuevos hospitales de San Antonio y La Serena. En los otros cuatro objetados, se llamará nuevamente a licitación.
Reacciones
Los parlamentarios lamentaron que, por omisiones menores y por falta de prolijidad de las comisiones evaluadoras, se hayan caído las licitaciones, con el consiguiente retraso en el diseño y construcción de hospitales. Además, exigen sumarios administrativos en los servicios de salud afectados.
El presidente de la instancia, diputado Marco Antonio Núñez (PPD), señaló que la gente entiende y sabe que estamos hablando de cuantiosas sumas de dinero para la construcción y la habilitación con equipamiento de un hospital. “Hemos descubierto que en el Hospital Las Higueras de Biobio, Linares y Barros Luco, han existido razones menores que se podían haber previsto con bases de licitación que son tan rígidas, que no permiten salvar el proceso de licitación, y que finalmente se declararon desiertas”.
El diputado Juan Luis Castro (PS), consideró inexplicable la situación del hospital Barros Luco Trudeau, donde hay omisiones absurdas y ridículas. “Uno se pregunta por qué la comisión evaluadora no rechazó esa oferta, por qué no dijeron a tiempo que esa oferta no se podía llevar a adjudicación en circunstancias que no cumplía requisitos mínimos o había omisiones menores».
El legislador insistió en que en este caso, a lo menos, debiera haber sumario administrativo para las personas que integran las comisiones evaluadoras que están en el anonimato y son responsables de echar abajo una licitación por falta de prolijidad.
Finalmente, la diputada Karla Rubilar (Ind), expresó que las omisiones eran completamente advertibles a tiempo. «El caso más burdo es el del hospital Barros Luco Trudeau, donde dice que si hay cualquier omisión la propuesta tiene que ser declarada inadmisible».
Añadió que «el problema es cuando una comisión evaluadora recomienda una empresa que no cumple con los requisitos. La pregunta es por qué esa comisión puede pasar por alto algo tan obvio y recomendar, y luego el director del servicio adjudicar». Por eso, indicó que “dado que se han caído hospitales en toma de razón perjudicando a los pacientes, demorando procesos muy anhelados por muchos años -al menos los servicios de salud-, deberían iniciar una investigación sumaria” para determinar quiénes son los responsables de no hacer su trabajo.