Nada menos que esta cantidad de dinero debió pagar el municipio por negligencias de funcionarios que perciben, por concepto de remuneración y horas extraordinarias, porque “trabajan sábados y domingos”, $ 3.000.000 mensuales más o menos.
La suma que debió cancelar el municipio ($72.000.000.) corresponde a una multa de la Dirección del Trabajo y la indemnización a Pedro Monroy por el accidente que sufrió cuando se cayó del tejado de una media agua en los instantes que se desalojaba la toma de Las Vertientes. Don Pedro Monroy tenía más de setenta años y trabajaba a las órdenes de don Alberto Alday, quién se encontraba, el día y hora del accidente, según el fiscal Suárez, desempeñando las funciones de su cargo, por lo que se entiende, debiera asumir su responsabilidad.
Lo más grave es que, a raíz de este accidente, vino la multa y la demanda que, se repite, costó al municipio la suma anteriormente descrita.
Tanto la notificación de la multa de la Dirección del Trabajo como la demanda de Pedro Monroy las recibió don Eduardo Bravo y, simplemente, las dejó sobre su escritorio sin informar al abogado municipal para sus respectivas defensas.
El alcalde decretó dos sumarios: Uno para determinar si hubo responsabilidad administrativa por el accidente de Pedro Monroy y se nombró fiscal a Patricio Suarez. Lógicamente, estaba todo arreglado para no encontrar responsables, y para eso se prestó Suárez. Y el otro para para establecer responsables por no haber informado de la demanda de la familia Monroy y designa Fiscal a Alberto Alday. O sea ellos mismos se encargan recíprocamente de los sumarios. ¿?
Este decreto es el N°63 de 23 de Enero de 2017, o sea hace más de dos años de su dictación y el fiscal Alberto Alday, Director de la dependencia que estaba en la mira por el accidente de Monroy, cuyo sumario lo substanciaba el mencionado Patricio Suárez, quien, como se indica anteriormente, no encontró responsabilidad de ningún funcionario, pero a solicitud de los concejales Maite Birke y Marco Quintanilla, la Contraloría ordenó reabrir, no puede determinar si hay responsable o no de haber dejado a la municipalidad en la indefensión, a pesar que hace dos años Eduardo Bravo reconoció en el Concejo Municipal, y consta en acta, que era responsable de no haber enviado la notificación de la multa de la Inspección del Trabajo ni la notificación de la demanda de Pedro Monroy a la Dirección Jurídica.
Por favor, señor alcalde, usted es una persona respetable y aceptada por sus electores por tres períodos, no puede llegar a éste extremo en defensa de su equipo de regalones.
Señor alcalde, ¿Está esperando que estas graves faltas prescriban para que así nadie responda por los $72.000.000. que debió pagar el municipio?
Basta, señor alcalde, de reírse de los habitantes del Cajón del Maipo con estos subterfugios para salvar de culpa a sus adláteres. Y, también, basta señores concejales de permitir que esto ocurra.