Esta empresa, al igual que Gas Andes, ha profanado las montañas del Cajón del Maipo. Aunque también hay mineras que lo han hecho, estas dos han causado un daño más profundo. Además, Alto Maipo se ha adueñado de la comuna mediante engaños a los cajoninos/as, con la complicidad de las autoridades de la época. Les ofrecieron una insignificante “dádiva” que nunca aumentaron, a pesar de haber más que duplicado sus inversiones. Sin embargo, algo ocurrió con las autoridades, quienes no fueron capaces de revertir el famoso “convenio social” en favor de la comunidad.
Haciendo un poco de historia, cuando llegó Alto Maipo, algunos pensaron en los puestos de trabajo, otros en las oportunidades de negocio, y otros, entre los que se incluye este medio, visualizaron que sería imposible derrotar a esta monstruosa empresa. Por eso, proponían enfocarse en renegociar el Convenio Social para obtener mejores condiciones en los aportes de la empresa. Sin embargo, la gran mayoría repudió de lleno el proyecto, creando organizaciones que llamaban a movilizarse para impedir lo que calificaban como el asesinato del Cajón del Maipo.
El movimiento fue exitoso en convocar masivos actos de protesta que incluso trascendieron al ámbito internacional. No obstante, el resultado es evidente: la hidroeléctrica se instaló, ignorando al grupo opositor. Tan pronto terminaron las obras, cesaron los empleos y, con ellos, los emprendimientos asociados. Lo único que quedó fue un grupo que pide aumentar la «dádiva» que la empresa entrega a la comunidad, solicitando que estos recursos se gestionen sin condiciones, permitiendo que los cajoninos decidan en qué utilizarlos, evitando repetir fracasos como el proyecto “Cajón Elige”.
Los resultados de ese proyecto dejaron en claro que la gente del Cajón del Maipo aún repudia a Alto Maipo. La poca participación lo demuestra: solo 230 personas votaron para decidir el destino de $1.500.000.000. Si consideramos que el padrón electoral supera los 16.000 inscritos, esto equivale a un 2,65% de participación.
Con esa mínima concurrencia, se decidió mejorar el Camping Municipal. Sin embargo, esos 1.500 millones de pesos podrían haberse utilizado para reparar establecimientos educacionales, logrando su reconocimiento por el Ministerio de Educación y obteniendo la bonificación de la jornada completa, lo que habría ayudado a paliar el déficit de la Corporación. Esto fue propuesto por el concejal Diego Trincado, pero él no integraba la comisión municipal. En su lugar, la componían Franco Manzano, muy honorable, pero cuya filiación política y participación en el gobierno anterior sugieren afinidad con la empresa, y el concejal socialista Luis Vargas, conocido por su apodo «OPO».
Actualmente, en el Concejo Municipal se sientan dos grandes luchadores por el NO ALTO MAIPO,Maite Birke y Anthony Prior . Es fundamental estar atentos a su proceder, ya que se espera que, de una vez por todas, las autoridades —alcalde y concejales— se enfrenten a Alto Maipo. Golpeando la mesa, deben dejar claro que son los afuerinos quienes, a costa de la destrucción del medio ambiente de la comuna, están lucrando y que, por ello, deben pagar lo justo.
