La primera quincena de Enero de este 2025 no ha estado exenta de acontecimientos fuera del promedio normal de accidentes, choques, hechos delictuales e incivilidades que se viven entre Marzo y Diciembre.
Evidentemente la época estival conlleva una «migración» que sobrepasa al doble de la población de San José de Maipo y por ende el doble de sucesos y externalidades negativas para los cajoninos/as.
No solo en el Cajón del Maipo hemos visto el colapso de los servicios de seguridad de nuestra comuna, también lo hemos observado en televisión en las costas del litoral central, algunas más al norte y balnearios improvisados como el Río de compuertas de Colina; contaminación acústica, basurales en «improvisados balnearios».
Los vecinos y vecinas están cansados que cada año, cada llegada del verano se convierta en un dolor de cabeza para cada uno de los habitantes de esta hermosa comuna, verdadero santuario de la naturaleza en plena cordillera.
Pero aquí es donde las autoridades son las únicas facultadas y llamadas a hacer cumplir la ley, a cumplir la normativa y ser un ejemplo para otras ciudades / balnearios. Cada contribuyente, que paga sus impuestos, permiso de circulación, contribuciones, etc, tiene el derecho de exigir a quienes les hemos entregado las facultad de administrar la comuna (alcalde) y este a su vez, le entrega la facultad de fiscalizar, prevenir y multar a quienes la incumplen (seguridad municipal)
La manera de abordarlo cada época estival no puede ser improvisado, convocar a mesas de trabajo cuando ya han pasado 10 o más días de los primeros de este 2025 o reunirse con el gobernador o delegado presidencial la misma semana que ya han muerto muchas personas, por el exceso de alcohol, manejo imprudentemente o porque llega un canal de TV (CHV) debido a la denuncia de los vecinos por el desborde de estero El Manzano.
La clave de todo esto no es la improvisación, es la planificación, pero con semanas, tal vez meses de programación. Ver que áreas se reforzarán, de qué manera y con qué recursos humanos y técnicos contamos. ¿Se debe redoblar el personal y los turnos extras?, ¿mayor labor educativa para quienes visitan San José?, ¿mayores sanciones para quienes boten basura o emitan ruidos molestos?, etc.
Toda labor planificada, con sanciones ejemplificadoras para quienes incumplan la ley o la normativa municipal vigente, mayor presencia de seguridad municipal y de carabineros, traerá necesariamente como resultado una comuna atractiva turísticamente hablando (y eso en San José no está en duda) pero además un polo de desarrollo seguro para inversionistas, cajoninos/as y turistas, tanto de Chile como del extranjero.
