(por Zeus)
Ante los funcionarios que viajaron al extranjero haciendo uso de licencias médicas, el alcalde de San José de Maipo ha señalado que no entregará los nombres “para no dañar a la familia”. Pero cabe preguntarse: ¿no debió pensar en eso el propio infractor antes de cometer el abuso?
No es la comunidad quien debe cargar con la culpa. Quienes usaron licencias médicas fraudulentas lo hicieron con recursos que bien pudieron aliviar las listas de espera en hospitales. ¿Pensaron estos verdaderos delincuentes en las familias que pierden seres queridos esperando una atención que nunca llega?.
¿Pensaron en sus propios compañeros de la Corporación, que cada mes viven con la angustia de no saber si recibirán su sueldo, sin poder acceder a atención médica ni préstamos porque sus cotizaciones no están al día?
¿Pensaron en los adultos mayores de la comuna, que enfrentan el invierno sin calefacción ni apoyo?
Algunos funcionarios han tenido al menos la dignidad de renunciar tras confirmarse el delito por la Contraloría. Pero quien viajó al extranjero simulando estar enfermo no tiene justificación alguna. Cometió un delito. Y no es sano ni justo que se proteja a un delincuente.
Es hora de que los concejales y la comunidad levanten la voz. No podemos permitir que la impunidad se enraíce en nuestro municipio. La transparencia y la rendición de cuentas son fundamentales para recuperar la confianza de los ciudadanos.